Después de publicar mi muy emocionado interés por la carrera de Fórmula 1 en Spa Francorchamps, en Bélgica, con un posible podio para Ferrari, me encuentro con una carrera pasada por una densa lluvia, en la que lo que abundó fueron los accidentes. Y ¿quién fue uno de los más afectados? ¡Pues ni más ni menos que la estrella de Ferrari Fernando Alonso! El español, después de un golpe propinado por Rubens Barrichello (quien hace un año causó un severo accidente al otro piloto de Ferrari, Felipe Massa), tuvo que recibir reparaciones en su auto, sin embargo, el daño no le permitió continuar por mucho tiempo en la pista. Así, el que pintaba para reanimar al equipo escarlata terminó viendo la carrera desde un monitor, mientras que Massa llegó en cuarto lugar.
Y como si en las calles se viviera un reflejo del estado del equipo italiano, el último modelo que la marca sacó a la venta al público en general (o tan general como lo pueda ser alguien capaz de comprar un Ferrari), el Ferrari 458 Italia, resulta tener un defecto de fábrica que... Bueno, digamos que se podría considerar como severo... Y es que en varios países, los propietarios de estos autos han sufrido un ligero percance en su vehículo: ¡Entra en combustión espontánea! Esto se debe, según los ingenieros y voceros de la empresa, a que el pegamento usado para una de las piezas no resiste el calor al que se ve sometido durante la conducción. ¿Qué no se supone que pasan años en pruebas e ingeniería para evitar cosas así? Por lo pronto, a los dueños de estos autos se les ha llamado para cambiar el pegamento y piezas defectuosos, mientras que quienes ya conocieron el sinificado de "motor de combustión" (aunque externa, en lugar de interna) recibirán otro auto como el siniestrado, aunque claro, con sus respectivos cambios de pegamento.
Por otro lado, otra compañía que cuenta con mi apoyo, Mazda, ha llamado a muchos de los propietarios de sus modelos Mazda 3 y Mazda 5 por una falla en el sistema de dirección, que ya ha causado varios accidentes por pérdida de control, pero aseguran que una alerta en el tablero avisa de existir semejante problema (¡qué considerado! ¡El auto me avisa que voy a chocar!), pero que su reparación provocará que sea necesario "un mayor esfuerzo" al girar el volante. Personalmente, prefiero hacer brazo a estrellarme contra una pared.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarHola! publicarás algo este mes?? Ahora yo te digo: "no nos dejes colgad@s"!!!!
ResponderEliminar