miércoles, 2 de junio de 2010

Como te va en la feria

Siguiendo con el tema de la fórmula 1, hoy quiero hacer notar un pequeño conflicto que existe entre los equipos que compiten por el campeonato. Como ya antes había mencionado, este año hay más equipos que antes, con un total de 12 escuderías y 24 pilotos. Esto alimenta el espectáculo que se busca para cualquier deporte. Sin embargo, hay una discusión entre equipos y la dirección de la FIA. Los nuevos equipos, a pesar de contar con algunos pilotos veteranos, no tienen la experiencia en ingeniería y estrategia de los consagrados. Esto ha provocado que en cada carrera el desempeño sea abismalmente dispar. Mientras Red Bull, McLaren, Ferrari o BMW parecen tener aviones en lugar de autos, Lotus, HRT y Virgin se quedan tan atrás que los líderes les llegan a llevar más de una vuelta y los alcanzan desde atrás, o como se dice en el argot automovilístico, son tan lentos que los "lapean". Esto ha causado malestar entre todos los pilotos. Los más rápidos casi tienen accidentes al alcanzar a los lentos (es como perseguir a un Chevy mientras manejas un Mustang) y los lentos se desesperan ya que están obligados a dejar pasar a los líderes. Entre los nuevos equipos ha surgido una voz que pide cambiar el reglamento para que los lentos no tengan que dejar pasar a los líderes y éstos deban sortearlos como a cualquier otro auto, aumentando el espectáculo. Evidentemente eso no hace gracia alguna para Mark Webber, Sebastian Vettel, Lewis Hamilton, Felipe Massa o Fernando Alonso. ¿Cuál es la solución entonces? ¿Obligar a los mejores equipos a reducir el rendimiento de sus autos? ¿Evitar la entrada a equipos que no puedan alcanzar un mínimo? O ¿hacer caso de las peticiones y convertir los autos lentos en obstáculos a sortear? Cada quién elegirá de acuerdo a su posición, si son lentos escogerán algo muy distinto a si son rápidos. Mientras se toma una decisión, nosotros sólo podemos esperar. En el video se puede observar un comparativo entre Mark Webber (Red Bull), primer lugar del ranking, contra Bruno Senna, piloto del nuevo equipo HRT y sobrino del gran Ayrton Senna, pero novato en la categoría. Es notoria la diferencia, y en una sola vuelta, Webber consigue una diferencia enorme.

martes, 1 de junio de 2010

De nuevo en las andadas y una inversión perdida

Por fin he regresado de entre las profundidades y las tinieblas. Los Juegos Olímpicos de invierno terminaron hace ya mucho tiempo... De hecho, estamos por llegar al verano. Canadá dio una impresionante muestra de cómo puede cambiar un país en lo deportivo. Por otro lado, la temporada 2010 de la Fórmula 1 comenzó hace ya también unos meses. Y ¿qué creen? ¡Tampoco podemos encontrar estas pruebas en la televisión abierta mexicana! Creo que a estas alturas ya es muy claro a qué se debe este cambio repentino de programación, y es que la compañía que televisaba estas carreras decidió destinar cantidades obscenas de dinero a la cobertura de la Copa del Mundo de futbol, retirando ese mismo dinero de todo lo que fuera otros deportes cuya transmisión fuera costosa. Pero esta vez es otro asunto el que me trae frente al monitor. Las carreras de autos fórmula son uno de mis pasatiempos favoritos (como espectador, claro), y me he mantenido al tanto de los acontecimientos de la Fórmula 1 desde hace algunos años. Así, quiero hacer notar algunos datos sobre esta temporada. El año pasado, el equipo Ferrari decidió varios meses antes de que terminara la temporada que ya no invertiría en el desarrollo de su auto F1, puesto que daban el campeonato por perdido y preferían destinar los recursos y tiempo al desarrollo del auto para la temporada 2010. Con esto, dejaban a sus pilotos e ingenieros de pista en circunstancias muy precarias... Entendido de otra forma, les dijeron "rásquense con sus propias uñas".
Dejando atrás semejante crueldad a los Ferraristi, eso significó que este equipo empezaría con muchísimo más poder la temporada 2010 que el resto de los equipos. Y así llegamos a la carrera de Bahrein el 14 de marzo, en la que debutaron dos equipos nuevos (Lotus y HRT), uno más regresó tras haberse retirado de la fórmula (BMW) y otro dos, que estaban unidos e incluían al campeón reinante (Brawn y McLaren Mercedes), se fragmentaron en tres nuevos equipos (Virgin, McLaren y Mercedes GP), que, sumados a los equipos ya presentes, dan un total de 12 equipos y 24 pilotos. En dicha carrera, ocurrió lo que el mundo esperaba: Ferrari demostró su poder al conseguir el 1-2 del podio. Entonces, ¿cuál es el problema? Pues básicamente es que a pesar de lo ocurrido, esto no dio más frutos. Ningún equipo se quedó cruzado de brazos para ver ganar a los autos rojos, y de pronto, un equipo que hace unos años era de poca monta se encuentra en el primer lugar del campeonato. Hablo de Red Bull, que hace sólo unos días fue superado por McLaren (el mismo equipo al que Mercedes decidió retirarle la titularidad de la compañía). Entonces ¿qué pasó con la gran capacidad y trabajo de Ferrari? ¿Abandonaron a sus pilotos para de todas formas quedar detrás de un equipo que vende bebidas energéticas y letales? ¿Creyeron en Ferrari que ya tenían todo para ganar y no funcionó? Y es por eso que llamamos a esto dormirse en sus laureles.
Aún quedan 12 carreras este año y mucho más por correr, esperemos una competencia fuerte y divertida, pero sobre todo, más equilibrada